Castro exige la renuncia de Moreira ante el "holocausto social" en San Martín: "La gestión más nefasta de la historia"

En una contundente embestida política, Cristhian Castro, prominente dirigente de La Libertad Avanza (LLA) en San Martín y fiel al proyecto de Javier Milei, Sebastián Pareja, Andrea Vera y al ingeniero Daniel Mollo, desató su furia contra el gobernador bonaerense Axel Kicillof y el intendente Fernando Moreira, a quienes acusa de sumir al Municipio en un auténtico “holocausto social”.
Castro no se anduvo con medias tintas: “La peor gestión de la historia en el distrito es la de Fernando Moreira. Exijo su renuncia a los cuatro vientos por el bien de las familias sanmartinenses, que sufren a diario la ineptitud y el despilfarro”.
Con un tono que osciló entre el reproche y la indignación, el dirigente responsabilizó al “kirchnerismo ramplón” por la falta de políticas públicas efectivas, el aumento desmedido de tasas y la manipulación mediática para “perpetuarse en el poder”.
La crónica de desastres va desde calles destruidas y oscuras (“un parque temático del delito”) hasta la falta de mantenimiento de hospitales y escuelas públicas. Castro recordó el caso trágico de José Quiróz, aplastado por una rama de ombú en Chacra Pueyrredón tras meses de denuncias ignoradas, y el asesinato del oficial César Benjamín Szadura en Villa Hidalgo, ejemplos, según él, de “una provincia paralizada que deja morir a los suyos”.
Con voz airada, concluyó: “San Martín vive en estado de emergencia permanente. Los vecinos claman soluciones, pero Moreira y el ‘burro’ de Kicillof sólo multiplican el caos”.
Apelando a las arengas de José de San Martín, llamó a los ciudadanos a no resignarse al “anacronismo cultural” y a exigir “un Municipio próspero y liberal, basado en la no agresión y el respeto por la vida, la libertad y la propiedad”.
Tras estas declaraciones, la interna política en el Conurbano bonaerense se calienta: ¿Responderá el oficialismo con anuncios de obras y promesas de inversiones, o Moreira dará un paso al costado para apagar el escándalo?
Mientras tanto, los vecinos de San Martín aguardan sin esperanzas, con la mirada puesta en un mañana que, por ahora, no llega.